Bulevar de los Pirineos Los Pirineos en el horizonte

El Boulevard des Pyrénées, con su vista panorámica de 180° sobre los Pirineos, ¡es el emblema de Pau! Sólo por sentarse en un banco y contemplar el horizonte merece la pena hacer una escapada a Pau. El efecto sorpresa está garantizado. Símbolo de Pau, el Boulevard des Pyrénées es un paseo panorámico frente a la cordillera de los Pirineos. Siempre hay un buen motivo para pasarse a tomar un café, un helado, comer o tomar una copa de Jurançon.

Cómo llegar

Un paseo panorámico

El Boulevard des Pyrénées es una parte esencial de la identidad de Palaiseuil. Un paseo de 1,9 km le llevará desde el castillo hasta el Parque Beaumont, entre la Edad Media y la Belle Epoque. Es un paseo imprescindible, tanto para estar como para ver.

A cualquier hora del día o de la noche, pasará por allí una y otra vez… Un footing por la mañana, un café en la terraza, un almuerzo a mediodía, un dulce y un té para merendar o una copa por la noche. Jóvenes y mayores, lugareños y turistas, sentados en la terraza, en un banco o apoyados en la barandilla, su mirada se desvía hacia el horizonte. Más que un paseo, ¡es un lugar para vivir!

Descubra

La postal

La vista es fascinante: en primer plano, las laderas, entre viñedos y bosques de colores cambiantes, y al fondo, contra el cielo azul de Pau, el emblemático Pic d’Ossau, ¡cuyo diente se eleva sobre los Pirineos!

Coronadas de nieve, apenas esbozadas en la bruma, resplandecientes al ponerse el sol, las montañas son omnipresentes, una auténtica postal que cambia con las horas y las estaciones.

«Pau es la vista terrestre más bella del mundo, como Nápoles es la vista marítima más bella».
Lamartine

Proeza técnica

En el siglo XIX surgió la idea de crear un paseo abierto al paisaje pirenaico, a medida que se desarrollaban los centros de vacaciones y el pirineísmo. Así nació el Boulevard du Midi (1854 – 1871), que unía el Castillo con la Place Royale. Era un lugar elegante y mundano. Veinte años más tarde, Alphonse Alphand, ingeniero cercano a Haussmann, propuso ampliar la idea:

«A Pau le falta el Promenade des Anglais de Niza».

En dos años, el proyecto se hizo realidad: se construyó una plataforma en la meseta que domina el río Gave, prolongada por un viaducto sostenido por 49 pilares. El Boulevard du Midi se convirtió en el Boulevard des Pyrénées, dando a Pau su cualidad única de ciudad de paisajes.

Horizontes palois

En 1944, se creó una clasificación específica para preservar las vistas más bellas del paisaje, los Horizons palois.

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Coteaux

Las laderas y sus viñas animan el paisaje con colores cambiantes… Descubra Jurançon, más que un vino, ¡es una tierra!

Paseos y excursiones

Para aprovecharlo al máximo, no necesita coche sino un buen par de zapatos, y si le apetece continuar el paseo, puede elegir entre el parque del castillo, a la derecha, y el parque Beaumont, a la izquierda.

Un lugar para vivir y conocer gente

En 1900, era el lugar de moda. Hoteles de lujo, villas y gente guapa… ¡todo estaba allí para convertirlo en el place to be! Era el apogeo del espíritu de la Belle Époque: Pau era cosmopolita, con la aristocracia europea, los magnates americanos y escritores como Francis Scott Fitzerald o Colette de paso. También era la capital de la aviación.

Pero cuando llegó la guerra, lo único que quedó fue el Boulevard des Pyrénées y la visión intangible de los picos nevados en el horizonte. Y sin embargo, aún hoy, son el reclamo de Pau, un efecto sorpresa que llega al corazón de todos los recién llegados. El Boulevard des Pyrénées y su excepcional panorama siguen deleitando a los habitantes de Pau y a nuestros visitantes.

Más información

El funicular Atemporal e improbable

Y como el bulevar discurre por la parte alta de la ciudad y la estación está en la parte baja, junto al Gave, ¡había que llevar fácilmente a los viajeros a sus hoteles y residencias! Así que la ciudad construyó un funicular, que ahora forma parte del paisaje. Es sostenible, gratuito y muy chic.