Un centro urbano vibrante y acogedor
Las calles resplandecen, los escaparates rivalizan en creatividad, los olores gourmet flotan en el aire…
Grandes y pequeños pasean bajo las guirnaldas, con un churro en una mano y un chocolate caliente en la otra.
La magia está en todas partes, la maravilla también, y el espíritu navideño está vivo.
El corazón de la ciudad se transforma, invitándole a un interludio encantado;
Las reuniones de amigos y los actos festivos son un regalo para la vista.
Aquí, las fiestas se celebran por todo lo alto, en un ambiente cálido y luminoso.